LE HAN HECHO DAÑO A JOSÉ SMITH.

La denuncia supuestamente honrada de nuestro «supuesto lado oscuro» en los eventos que siguieron al martirio de José Smith, y la disputa por la Sucesión, está lejos de ser prueba de una concepción equilibrada, constituye exactamente lo contrario.

Da la impresión de que hay una afirmación encubierta de superioridad. Parece como si se quisiera decir: «Soy psicológicamente complejo, no soy crédulo, estoy lleno de preguntas, dudas, investigó, adquiero conocimiento, mientras que ustedes, son ingenuos, fanáticos, borregos seguidores de una matrix (Salt Lake City) la cual es una pura máquina de mentiras.”

—Una pregunta

¿De dónde proviene es «supuesto saber»?

Se ha constituido toda una «biblioteca viva». Coadyuva a ella, el proyecto oficial de la iglesia: “Los papeles de José Smith”, diarios de miembros y lideres de la Iglesia en sus primeras décadas de la Restauración, registros en periódicos de la época, reconstrucciones y comentarios por historiadores empíricos y novatos, toda una librería viva, cuyo contenido se difunde por youtuber, ansiosos de posicionamiento, con el objetivo de mayor monetización.

Estos archivos se han constituido, para que la gente se pueda identificar, con su particular narrativa de la historia temprana de la Iglesia.

Sin embargo, el método tiene sus claras limitaciones, por ejemplo: puedes invitar a un matón nazi, para que cuente su historia, y llegar a pensar que, si Hitler fue nuestro enemigo, era porque no conocíamos su historia, y terminar identificándote con Hitler. Podemos terminar creyendo las historias más estrambóticas.

Es cierto, existe una «idealizada narrativa interna» que da soporte a los mandatos simbólicos que asume la institución en la vida pública, es decir la de ser la IJSUD.

Esta historia, es siempre una pantalla, cuya finalidad es volver palpable, accesible a mi narcisismo imaginario, mi identidad socio simbólica, como miembro de la IJSUD, identidad que se externaliza en el gozo de los Santos de ser parte de la Iglesia verdadera,

►La tendencia negacionista y su oscura narrativa interna.

La tendencia negacionista a la poligamia de José Smith está construyendo una contraparte a la INI «idealizada narrativa interna», nos presenta un relato interno oscuro, lleno de intriga, complot, de los acontecimientos que devinieron después del asesinato de José Smith.

Los negacionistas practican una crítica ideológica, que consiste en crear estrategias [la biblioteca] para desenmascarar esta supuesta hipocresía de la «idealizada narrativa interna» y sus emociones «sinceras», según ellos, elaborada exposición histórica cuyo propósito es que se le tome en serio.

—Ahora bien, ¿Soy Santo por pertenecer a la IJSUD, sustentada por su «idealizada narrativa interna», o soy Santo porque simplemente me integro al mensaje de la IJSUD’

Por ejemplo: En mis primeros años de miembro, tenía un fuerte sentimiento que me había integrado a la mejor gente del mundo, hoy pienso diferente, actualmente mi afiliación es al mensaje, más que a los santos, de modo que se han postergado en mi algunos aspectos de la cultura sud.

«La idealizada narrativa interna» no es la verdad rigurosa, esta es una forma de defensa, que protege de todo lo carnal, sensual que pervive en el interior de la IJSUD, constituida por cada uno de los individuos que la integran, y que los protege de su propia verdad interna individual.

La idealizada narrativa interna, coopera, colabora, da soporte al desarrollo de mi identidad verdadera, mi identificación simbólica al mensaje de la IJSUD.

La ONI «oscura narrativa interna” de los negacionistas tampoco es la verdad. Porque toda verdad tiene estructura de ficción.

Dicho de otro modo: en ambos casos, la verdad es una ficción, pero esta ficción reside en un lugar distinto.

Tanto la INI «idealizada narrativa interna», como la ONI «oscura narrativa interna» son imaginarias. Lo verdaderamente importante es lo simbólico, es el mensaje.

Lo que sería realmente difícil de asimilar es que tanto una, como la otra, de estas narrativas imaginarias sean verdaderas.

El hecho que la «idealización» resulte verdadera es tan difícil de asimilar, lo muestra, la existencia siempre de dudas, preguntas, la incansable búsqueda de la historia entre los Santos. En algunos casos, se deviene en la «negación», en la cual la sordidez es tal que resulta insoportable. Tal es lo ocurrido a mi amigo negacionista.

En ambos casos la dificultad de asimilación vendría a constituir Lo Real.

—La salida es pasar de lo imaginario, a lo simbólico. Transitar de la «idealizada narrativa interna», o de la «oscura narrativa interna», al plano simbólico, en otras palabras, centrarnos en el mensaje de la IJSUD.

En fin, se ha formado algo “complejo”. Por ejemplo, mi amigo negacionista, «desafía» heroicamente y con toda sinceridad la narrativa idealizada de la poliginia de José Smith. Hasta estaría dispuesto a ir a la cárcel por sus ideas.

—Pregunta: ¿No es la propia naturaleza ilusoria de su creencia lo que vuelve la posición subjetiva de mi amigo negacionista, tan trágicamente sublime?

La realidad histórica de la poligamia de José Smith, hace que las convicciones de mi amigo negacionista resulten más majestuosas.

No basta con decir que estamos ante una convicción ética tan fuera de lugar, ante una confianza ciega que se niega a enfrentarse a una realidad diferente a la de su punto de referencia.

Conviene aquí plantearse una pregunta: ¿Qué pasa si esta negación, repudio a una realidad fuera el elemento más profundo de todo posicionamiento ético?

Si tal fuera el caso, tanto la postura de los creyentes en la poligamia, como el pronunciamiento de sus antagonistas, los negacionistas, serían correctas. Por ese motivo, las demonizaciones estarían demás. Es realmente una paradoja.

El auténtico acontecimiento, la dimensión de lo Real, no radica en la realidad inmediata de la poligamia de José Smith, o la no poligamia, sino en el modo en apareció José Smith a los ojos de sus contemporáneos.

—Otra pregunta: ¿Podemos ser éticos si creemos, o si no creemos en la poligamia de José Smith?

—PUES, SÍ.

La respuesta es que sí: toda ética «humanista», aquella que pone, al ser humano y su bienestar en el centro de todas las consideraciones éticas. A diferencia de otras corrientes que buscan respuestas en entidades divinas, el humanismo se basa en la razón, la experiencia y la empatía humana para establecer sus valores y principios. Esta ética, en ocasiones niega al otro, niega al semejante.

En otras palabras, según este camino, en cuanto a la cuestión de la poliginia de José Smith, no ha de importar la creencia del otro, eso no es lo esencial.

►”LE HAN HECHO DAÑO A JOSÉ SMITH Jr, Y A SU FAMILIA.”

Mi amigo negacionista se lamenta así tristemente de la pérdida del Profeta José Smith, y comparte su esperanza de reivindicación. Sin embargo, olvida algo muy importante:

—El oficio de Profeta es peligroso.

Basta recordar el incidente ocurrido en Hiram, Ohio, el 24 de marzo de 1832, en una turba hostil cubrió a José y a su compañero Sidney Rigdon con brea y plumas frente a sus casas
.
El evento fue una temprana objetivización de la profecía del Ángel Moroni: que su nombre sería conocido tanto para bien como para mal entre todas las naciones, tribus y lenguas.

Ser un portavoz de Dios era [y es] un privilegio, pero también un oficio peligroso debido a la confrontación, la oposición y los riesgos asociados con la fidelidad a la verdad divina.

Comprendo la situación emocional de mi amigo negacionista, pero la reivindicación de José Smith, no es una parte oficial de la doctrina mormona. La Iglesia enfatiza el perdón y la reconciliación, y la memoria de José Smith sigue siendo importante para sus miembros.

Apelar a la compasión para que se nos preste atención suena a manipulación.

En la “biblioteca negacionista", hay mucho contenido extraído de los diarios personales que pueda ser evidencia, pero no es una prueba.

Los diarios son algo íntimo y privado. Un diario personal pueda parecer una evidencia sólida, su valor como prueba legal en un litigio está sujeto a numerosas restricciones y limitaciones.

Su contenido suele revelar pensamientos, sentimientos, experiencias personales, deseos y anhelos. Por ejemplo: el caso del Orson Hyde, en el que, en cuanto a la sucesión, el Q Doce asumiría la dirección de la Iglesia, en su suerte de regencia, hasta que José Smith III, adquiera la edad de asumir la presidencia, eso no prueba nada. Más bien suena a la expresión de un deseo.

Eso solo demuestra que Orson Hyde, cabalgaba en dos caballos, sus recuerdos estaban matizados por sus emociones.

En última instancia, la defensa de un profeta fallecido es una elección personal basada en creencias religiosas y valores individuales.


Algunos pueden sentir la necesidad de proteger su reputación, mientras que otros pueden preferir enfocarse en su propio crecimiento espiritual.

Cada persona decide cómo honrar y recordar a los profetas en su vida.